Cadaqués, Gerona (Cataluña 2011)

En septiembre de 2011, planeamos conocer la Costa Brava completando así a grandes rasgos el norte de la península.

Ese año cambiamos de coche, lo que ha contribuido a que recorramos la península. Para empezar elegimos Gerona, algunos pueblos y la capital, hospedándonos en Cadaqués.  Un pueblo pintoresco y encantador que conserva viva la memoria de Dalí. Sobretodo si eres turista.

Nos hospedamos en el pueblo, a dos minutos del mar. De  donde nos poníamos en la playa, a 10 minutos. A mi lo de estar sentada o larga al sol me da calor, así que un día dejé a mi ya esposo en la playa y me fui a dar un paseo por el pueblo, hasta la iglesia, en la que entré. Normalmente no entramos en las iglesias, pero a mí me gusta. Primero le llevé agua y el Marca; luego me fui tranquilamente.

  

Desde el exterior de la iglesia se divisa todo el pueblo. Di un par de vueltas hasta bajar a la costa y recogí a mi abandonado pero entretenido esposo para ir a comer.   Llamaron para decirme que había fallecido mi abuela e interrumpimos las vacaciones para asistir al funeral. Las interrumpimos poco, suficiente para confirmar que no teníamos interés en recorrer de nuevo la carretera de acceso a Cadaqués para cenar en algún pueblo cercano.

La playa es de conchas y piedrecitas. Sobra decir que está bañada por aguas cristalinas de efecto relajante. Aún así, no aguanto al sol.
Al año siguiente compramos la sombrilla.

Descubrimos un buen restaurante para comer, Dando un paseo vimos otros sitios que tenían buena pinta. Había de todo pero ya que estábamos allí, un día fuimos hasta el cabo de Creus pasando por Portlligat, el pueblo donde está la casa-museo de Dalí.

En la habitación teníamos una terraza cuyas vistas me encantaban.

En el edificio de enfrente había dos amigas, extranjeras, una en cada planta, que una tarde tuvieron una sesión de sexo poco discreto y nada silencioso, pero coordinado. Se iban preguntando qué tal. En su idioma, pero se entendía.

Este viaje fue agridulce y así lo sigo recordando. Estrenamos el coche con el que hemos viajado por toda la península, y lo que nos queda. Los paisajes, la zona del Cabo de Creus, Portlligat y Cadaqués en sí mismo son preciosos.
Al parecer en verano se masifica un poco.